Institución deshumanizada
Ha decaído muchísimo en los últimos años. La higiene de la institución deja mucho que desear. La tasa de repetición de los chicos es altísima, deberían mejorar el trato con el alumnado. También me parece mal que hagan publicaciones religiosas, políticas e ideológicas. En los talleres el trato es bestial, los profesores no tienen ganas de explicarle a los chicos y los dejan a merced (se enojan si se les realizan consultas de como manipular los dispositivos o máquinas, muchas necesitan medidas de precaución que al no conocer ponen en riesgo la integridad de los chicos). A las maquinarias no se les realiza mantenimiento alguno y la mayoría provienen de donaciones externas. Estas podrían ser financiadas con las altas cuotas que nos cobran a los padres (Hay una cuota adicional que se cobra solo para el taller). A pesar de estar subvencionado por el estado cobran sobreprecio de los lockers y dejan a muchos chicos sin la posibilidad de tener un locker durante el año. Más que una institución parece una fabrica deprimente y lúgubre. Que en lugar de motivar a los estudiantes los empuja a un abismo del que es difícil escapar.
Técnico Electromecánico