No esperes saber nada. La católica no publica sus listas de espera (ni las de admitidos). Sabrás la nota que te han puesto y tu puesto en lista de espera pero de nada te sirve porque no conoces nada de los demás. No sabrás a quién llamaron, ni su nota, ni quienes te preceden en la lista de espera ni quienes van detrás con lo que en realidad, pueden llamar a quién deseen. De hecho, según me dijeron ellos mismos, no habían llamado a nadie de la lista de espera a final de julio. ¿Es cierto que nadie renunció después de la admisión? Sobre todo teniendo en cuenta que las listas de admitidos salieron antes que las listas de todas las públicas, resulta difícil de creer. En fin, que es un proceso muy, muy oscuro que desprestigia tanto a la institución como a sus últimos responsables.
Ingeniero en Informática