La carrera de Abogacía tiene una sólida formación que orienta su labor al análisis crítico y humanista de los problemas jurídicos de la sociedad, en los cuales prevalezca la protección de los principios y derechos de las personas. El mundo moderno actualmente en crisis ha provocado a nivel mundial y particularmente en nuestro país, tanto en estamentos públicos como privados, un alto índice de conflictividad social que por su naturaleza requiere la solución de estos conflictos a través del asesoramiento legal y jurídico. El abogado actual innovador del derecho, tiende a una nueva etapa, a la mediación como forma alternativa de solucionar conflictos, reflejando una cultura en la que se destaca la predisposición a la renuncia de intereses personales en busca de la equidad y justicia y mejoramiento de la convivencia en la sociedad.
Abogado de los Tribunales y Juzgados de la Republica